Mundo virtual, Mundo real.
Después de ver los documentales de “El precio de lo gratuito” y “¿Libertad en la Red?” nos deja mucho para reflexionar sobre puntuales aspectos en nuestra interacción en este medio, ¿A qué precio estamos dando información acerca de nuestras vidas?, ¿hasta qué punto están respetando nuestros derechos para beneficio de otros?, ¿cómo estamos siendo vulnerados por la Red? ¿De qué manera estamos permitiendo ser objeto de la publicidad? ¿Hasta dónde llega el sueño de los fundadores de la red, para que sea libre y gratuita para todos?
Los vídeos aclaran muchos de nuestros interrogantes, aunque podrían surgir infinidades de estos ya que es un tema que siempre se está reinventando y que constantemente abre nuevas fronteras para el mundo.
Pero de esto precisamente no tratará este análisis, lo centraremos en una comparación de lo que es nuestro país actual, de qué forma está afectando nuestra población nacional e hipotéticamente que pasaría si se aplicara algunos métodos con los cuales funciona la Red en nuestro estado comúnmente llamado corrupto e injusto.
El tema central del primer video “El precio de lo gratuito” postula que el producto on-line no es el contenido sino nosotros, nos cuenta que como Google, muchas otras páginas web han convertido nuestra curiosidad en una mina de oro, logrando saber que queremos, que buscamos, cuáles son nuestras preferencias, que enfermedades tenemos, y hasta los más profundos secretos.
Como decía Douglas Rushkeff, escritor de “Life link” –Son buenos averiguando lo que nos gusta, me dicen que es y así puedo saber que hace la gente como yo, así puedo ser más como otras personas. Los motores de recomendación me dice que le gusta a la gente, y me anima a ser la persona que soy, me ayudan a convertirme en el prototipo de persona que soy y cuando soy el tipo de persona que me he convertido, soy menos yo y más me convierto en un tipo del montón.
Esta frase en especial me llamo mucho la atención, y más si la intención es relacionarla con nuestra sociedad actual colombiana, pues como en la Red pasa lo que Douglas Rushkeff menciona, esto también pasa en los barrios pobres y marginados de nuestro país, los cuales no tienen acceso ilimitado a ordenadores que les permitan estar conectados e informados de las nuevas tecnologías, pero si están informados, incluyendo niños y jóvenes, lo que pasa en sus barrios y los cuales les toca sufrir o en muchos casos unirse a la violencia del día a día de nuestra sociedad. Me parece muy apropiado relacionar estos dos fenómenos los cuales son una realidad y de cierto modo tienen alguna relación.
Los seres humanos tendemos a seguir a alguien, a identificarnos con un grupo de personas y relacionarnos con ellas, así funciona en el mundo tanto real como virtual, y ¿qué es lo que pasa cuando esto se da en un país donde la educación, más que ser un derecho, es un privilegio de pocos? ¿Cuál es el tipo de prototipo de personas con las que se están identificando los niños y jóvenes? Y finalmente ¿Cuáles son las oportunidades que les brinda la sociedad y el estado para lo que se quieren convertir en un futuro?
La diferencia es que motores de búsqueda como Google, te dan opciones, para que sigas lo que te gusta, a un alto precio, pero de eso hablaremos más adelante, mientras que las opciones que te da un barrio donde para poder trabajar y vivir tranquilos tienen que ser “vacunados” por bandas delincuencíales que generan más violencia, son limitadas y desiguales.
Me refiero a que el prototipo de persona “exitosa” con el que les toca crecer a los niños en los barrios más pobres, es del sicario o dueño de la plaza que tienen dinero, moto y que para poder comer y sostener una familia pueden robar y hasta matar.
Del video “El precio de lo gratuito” podemos concluir que constantemente buscamos reconocernos, somos objeto de la publicidad y comercializan nuestra identidad, nos volvemos consumidores consumibles, pero en el mundo real no es una opción que nos toque ser un consumidor de violencia, guerra, desigualdades e injusticias.
De igual manera podemos hacer una comparación del documental “¿Libertad en la red?” al mundo actual que vivimos, en el sentido de que la Red se hizo para ser libre y gratuita, pero realmente no lo está siendo, y que esto pasa con nuestros derechos y con nuestras vidas en la sociedad, se hicieron para respetarse y que sean iguales para todos pero desafortunadamente y de igual manera, esto no se está cumpliendo.
La Red, según lo que se puede entender del vídeo es la nueva frontera de la humanidad, que nos da el mismo acceso a todos, igual voz, el mismo potencial, pero esta igualdad prometida por la red como dice en el documental choca con el deseo de poder del hombre. De la misma manera el sueño de un mundo de paz, donde se viva la igualdad, el amor choca con lo mismo, el deseo de poder del hombre.
Una de los fenómenos que me llama en especial la atención en el mundo es la desigualdad extrema en la que vivimos, unos tienen demasiado, en exceso y otros no tienen nada y viven en la extrema pobreza, ¿a qué se debe esto? ¿Qué es lo que estamos haciendo mal? ¿Gobiernos mal dirigidos? Lo que sabemos es que esta es una realidad, y sabemos también gracias al documental que la visión de la red como un espacio único donde todos somos iguales es un recuerdo nostálgico.
Pero como en todo, lo último que se pierde es la esperanza, creo personalmente en un mundo virtual menos manipulador y en un mundo real menos violento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario